¿Qué debería hacer?
1.Evalúe la situación para ver si su intervención ayudará o solo aumentará el estrés. Si no estás seguro, pregunta. Además, no preguntes en general, sino en qué forma específica puedes ayudar.2. Muestre el máximo número de pequeñas señales de atención: abra la puerta, vigile el carrito de la compra.3. Expresar simpatía con una mirada y palabras de aprobación.4. Ofrécete a llevarle a mamá una taza de café o té.5. Preséntate como abuela, madre de tres hijos o tío de doce para demostrar que tienes experiencia relevante y que no eres un pervertido que quiere tener contacto con un niño.6. Intervenga si el niño está en peligro (por ejemplo, corriendo hacia la carretera).Foto: Getty Images
Qué no hacer?
1.No se acerque ni toque al niño sin el permiso de los padres.2. No le aconsejes a tu madre qué es lo mejor que puedes hacer en tal situación.3. No le ofrezca a su hijo dulces ni ningún otro alimento. En primer lugar, no sabes si tiene alergias u otras contraindicaciones de salud. En segundo lugar, no se debe enseñar a los niños a quitar la comida de manos de extraños.4. No te quedes ahí como un espectador. Nadie necesita espectadores durante los peores momentos de la vida de sus hijos. Si no puedes ayudar, simplemente sonríe tranquilizadoramente y pasa de largo.